Falsos predicadores...Y estos introducirán en sus enseñanzas herejías, negarán al Señor atrayendo sobre sí mismos
destrucción repentina. Y muchos seguirán sus disoluciones, por causa de los
cuales el camino de la verdad será blasfemado, y por avaricia harán mercadería
de vosotros con palabras fingidas. Sobre los tales la
condenación no se tarda, y su perdición no se duerme. 2 Pedro 2.
Falsos predicadores...Estos señores son expertos en descontextualizar los textos
bíblicos para sacar versos fuera de contexto para apoyar sus supuestas nuevas
revelaciones. Estos falsos maestros dicen muy a menudo: "el Señor me mostró, el Señor me reveló,” olvidan
que el canon bíblico está cerrado, y que no se puede alterar su contenido.
Los falsos profetas hablan profecías mentirosas de paz y prosperidad... como el profeta Hananías que anunció falsas ilusiones cuando en realidad se acercaba el cautiverio babilónico. Los falsos profetas no confrontan el pecado, son especialistas en adular el ego de quienes los invitan, no hablan de santidad, de integridad, ni de juicios divinos. Ellos tienen el espíritu del anticristo y llevan a sus seguidores al infierno.
Los falsos profetas hablan profecías mentirosas de paz y prosperidad... como el profeta Hananías que anunció falsas ilusiones cuando en realidad se acercaba el cautiverio babilónico. Los falsos profetas no confrontan el pecado, son especialistas en adular el ego de quienes los invitan, no hablan de santidad, de integridad, ni de juicios divinos. Ellos tienen el espíritu del anticristo y llevan a sus seguidores al infierno.
Falsos predicadores...Andan buscando la aprobación de los hombres, fama y
riquezas. Tienen el espíritu de Jezabel, son engañosos. Sus famosas profecías casi nunca se cumplen, el Señor los avergüenza, les hace el día como noche y la noche como día. Estos dan rienda suelta a su imaginación, engañan y son engañados.
Los Falsos... Intimidan y lanzan maldiciones a quienes se atrevan a confrontarlos. Estos se creen más que Jesucristo quien enseño a bendecir y no a maldecir. Son obreros fraudulentos, con gran apariencia de piedad, están entre nosotros pero "no" son de nosotros. No debemos creer a todo "profeta" es necesario escudriñar bien las escrituras. 1
Juan 4:1; "Amados, no creáis a todo espíritu, sino probad los
espíritus si son de Dios; porque muchos falsos profetas han salido por el
mundo"